Los alumnos de Segundo de Bachiller y sus profesores de Lengua llegamos a Soria ayer, jueves. Desde el Mirador de Cuatro vientos recordamos con Machado a Leonor y el peso de su ausencia. Y nos preguntamos si tenía sentido volver a lo que fue cuando ya no es con Cernuda.

En la Alameda Cervantes nos dejamos seducir por Gil de Biedma, Benítez Reyes o Gerardo Diego y la poesía se convierte en vehículo y motor de Soria, espacio poético.